Memorias de Dublín

Día 2-3 de marzo de 2007

El fin de semana transcurrió según lo esperado, llegada a Dublín según lo esperado, encontramos el albergue francamente bien, la verdad es que no era muy difícil encontrarlo y ahí comienza la historia...

Una vez dentro del albergue, que casualidad, no había nadie para atendernos hasta las 23:30, pero no pasa nada, no somos españoles o qué?, pues ale, bocata fuera y a zampar. Ahí mientras comíamos, cada uno se fijaba en una cosa, uno en los carteles, otro en su cartera, otros al vacío, etc...

Después de esto, previa charlilla con un pive francés que hablaba bastante bien, por no decir muy bien el castellano, nos dijo una gran frase: "La J es de Puta Madre", haciendo referencia a como se ríen de los españoles por decir Jaus (House) y no hjhaus. Y ya por fin nos dieron la habitación, la 309.

Subimos, y nos encontramos un palacio, una habitación superamplia, con 8 camas de 1,35mtrs, con una mesa enorme en el centro de cristal con motivos florales sobre ella, 8 perfectas almohadas, mulliditas y gruesas, y como no, un sillón reclinable con función de masaje... Menos mal que no andaba por ahí la Trujillo, que seguro que saca una nueva idea de solución habitacional.

A las 0:00 todos al pincho (la aguja), porque Dani y Esther, y la cuñá y la amiga y... habían quedado con Rauliño, como llegábamos pronto (raro es) nos fuimos a probar la primera cerveza irlandesa por el módico precio de 5€, por cierto, nos pidieron el carné de identidad, que fuerte, bueno, es cierto que los guiris aunque tengan 30 años, parece que tienen 16, pero entonces a nosotros se nos notaría que somos como el abuelo tortuga.

Ya por fin salimos, y haciendo sombra al pincho, vimos a un ser estirado, con las manos en los bolsillos en posición de ataque, que llevaba entre las piernas una bolsa de la bolera. Se aproximó a el una chica para pedirle un cigarro y así comenzar una bella conversación, cuando ella le invitó a ir detrás del pincho, el pensaba que ya estaba hecho, solo habría que contarle un par de chistes y ver si le hacían gracia. Pero todo se le vino abajo, o quizá arriba, cuando vió a un grupo de Españoles de pura cepa, parecidos a los amigos que dejó en la Madre Patria. Después de besos y abrazos, nos enseño su "espada" y nos encaminamos a tomarnos algo a un bar "español".

Después de esto, buenas noches y a sobar.....

Día 3 de marzo de 2007

Tocaba hacer turismo, a pesar de algunos, por lo que nos pusimos a andar, que si el Trinity College, que si el Banco Nacional, que si una Iglesia - Oficina de Turismo, etc...

Que pensaríais si vierais una panda de guiris subidos en unos bancos en frente del Ayuntamiento de Madrid??, seguramente que son unos frikis que no han visto una ciudad en su vida, o a lo mejor, si fuerais unos frikis del arte, pensaríais que es una gran obra de arte expresionista.

Pues esto es más o menos lo que ocurrió frente a la fachada del City Hall of Dublin!!!!

Después de comer comida típica de Irlanda (McDonalds) seguimos andando, aunque más de uno lo que quería era café, bartola y copa...

Después de ver durante un rato un partido de rugby en el campo del Trinity College, donde pudimos apreciar los grandes saltos que pegan algunos jugadores, y como los tiros a puerta son imparables por los porteros, nos encaminamos a cerrar nuestra vuelta. Que mejor manera, que un chaparrón de 5 minutos que nos dejó calados??, bueno, por lo menos pudimos sacar algo diferente (aunque para otros fuera un gilipollez porque no era el primero que veía...) el resultado fue este:

Ya por la tarde-noche a eso de las 19, nos tomamos unas copillas en el palacio, por eso de departir tranquilamente, como una fiesta del Tuperware, pero con copas improvisadas con vasos de batido de McDonalds, con vasos del avión, etc...

No estuvo nada mal, nos reimos mucho, bebimos bastante, y nos pusimos muy graciosos, de hecho, nos dimos cuenta de que con un par de copas, algunos se convertían en superhéroes, en esta fotografía captamos la imagen de 3 de ellos, de izquierda a derecha, "Elastic Man", "Iron Man" y "Blow Woman".

Pero ante todo, en este viaje, prevaleció el amor, la unidad, el juego del teto, no era difícil vernos en las calles de Dublín dándonos amor, por cada esquina, en cada hueco, en cada resquicio...

Y poquito más, se hizo corto, pero volveremos a vernos, aquí o allí no lo se, pero lo haremos!!!!

Rauliño, come más que no me comes nada!!!!!
Todos y cada uno de nosotros,

aunque en distintos sentidos,

dependiendo del "sexo"

del interlocutor